martes, 21 de diciembre de 2010

Mamar y dar topes: Breve biografía del Jefe Diego.

Mamar y dar topes: Diego Fernández de Ceballos.
Diego: Muestra viviente de un país, en el cual, no hay culpables.
¿Lo que es bueno, para los Poderes Fácticos, es bueno para México?
Oponerse a ello ¿Una amenaza para México?

Testimonos. Blog. Un futuro, con futuro, para México.


Por Cipriano Barreto Mendoza.


La aparición de Diego Fernández de Ceballos, tiene varias interrogantes, que no trataré en este comentario.
Lo que haré, será examinar el comportamiento de autoengaño, en que solemos caer los seres humanos.
Se dice que cada individuo es visto de tres formas: Cómo lo hacen los demás, cómo lo hacemos y cómo somos en realidad.
Cómo nos ven; cómo nos vemos y cómo somos.
En el caso del jefe Diego, en sus primeras declaraciones, después de su aparición dice: “En caso de que me hubieran matado, me hubiera ido con la conciencia tranquila, por haber trabajado para México, desde mi partido el PAN”.
¿Es esto cierto? Varios grupos y personalidades, han cuestionado, no ahora, sino desde hace tiempo, su comportamiento polémico, como funcionario y litigante.
En varios casos, el límite entre uno y otro, no ha estado claro y se ha hecho una mezcolanza en que no se sabe, o se sabe muy bien (o todo lo contrario) que se ha traficado con la influencia de su doble situación, para inclinar la balanza de una posición a la otra, pero invariablemente en su beneficio económico y/o político.
En términos muy mexicanos: A Dios rogando y con el mazo dando. El que a dos amos sirve, con alguno queda mal. Silvar y tragar pinole. No da salto sin huarache. MAMAR Y DAR TOPES.
Así, podríamos seguir, con varios refranes que describen el comportamiento polémico del Jefe Diego y de varios personajes y agrupaciones que tienen afinidad con el “aparecido” y que es un síntoma de la descomposición de nuestro sistema económico, político y social.
En México, existen culpas, crímenes y/o hasta genocidios, pero no hay, no puede, ni debe haber culpables, criminales y/o genocidas. Particularmente si pertenecen al selecto y minoritario club de los Poderes Fácticos.
Veamos por qué:
Diego es un “ganador”, porque utiliza todos los medios, habidos y por haber, para salirse con la suya.
Esto, según él, es en bien de México pues, cómo se decía de la General Motors: “Lo que es bueno para Diego, es bueno para México”.
Esto no es una excepción, sino que es un mecanismo de auto suficiencia, que se ve a sí mismo, como el ombligo de la verdad y de la razón.
Igual ocurre con otros grupos y/o personajes, que ven la ilegalidad en el comportamiento ajeno y/o la verdad revelada en sus dichos y afirmaciones:
Mario Sánchez Ruiz, flamante presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en su protesta como tal, dijo:
“En México nuestros problemas empiezan con la ilegalidad: Violar una ley, vender o comprar el voto, el contrabando, la piratería, no pagar impuestos, el mal uso de los recursos públicos. No respetar las reglas por más inconsecuentes que sean. La ilegalidad es el principio de todo lo que los mexicanos queremos erradicar”.
Después de este rollo moralino. Recomienda cometer la ilegalidad, de aumentar 2.50 pesos diarios el salario mínimo y se queda tan campante y sin sentimiento de culpa, por su genocidio económico. (Ver: El Ponchis empresarial.)
De igual forma, La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM) emite un decreto, para “elevar” el salario mínimo en 2.34 pesos diarios, considerando que ello: “Servirá para mejorar el poder adquisitivo del trabajador, crear empleos y garantizar la inversión, además de aumentar la capacidad de compra”.
Esta verdad revelada, contrasta con la realidad. Pero ello, ni al flamante presidente del CCE, Mario Sánchez Ruiz; ni de los integrantes sindicales, empresariales y del gobierno, de la CNSM, les importa un comino, pues sus decretos son inapelables y no requieren mayor argumentación en contra, simple y llanamente porque su verdad, es LA VERDAD, y punto.
Al igual que el Jefe Diego, Mario Sánchez Ruiz y los integrantes de la CNSM, tienen la autosuficiencia y la prepotencia de que: “Lo que es bueno para ellos y sus compinches, es bueno para México”.
Y por supuesto, habrá quiénes no sólo compartan esto, sino que irán más allá.
Buscarán que sus afirmaciones se inscriban en letras de oro en los muros del Congreso y que sus opositores, sean declarados:
“Una amenaza para México”.
Los poderes fácticos afirman que: “los salarios no se pueden aumentar por decreto, porque distorsionan a la economía”. Y estamos de acuerdo con ellos pero por la misma razón, decretar “aumentos” miserables o salarios colonialistas, también distorsionan la economía pero SÓLO QUIEREN ADMITIR LOS DECRETOS QUE LOS BENEFICIAN.
Nunca, ni siquiera en defensa propia, reconocen o aceptan los decretos que mejorarían, no sólo los ingresos de los trabajadores sino que, en un efecto dómino a la inversa, levantarán a las Pymes, habrá Empleos crecientes que crearán un Mercado Interno, la Recaudación Fiscal se incrementará y ello permitirá una mejor Infraestructura y Servicios.
En resumen: Habrá un crecimiento con desarrollo económico, político y social y en consecuencia la violencia será evitada en su origen: La desigualdad.
Afirmamos, que los Poderes Fácticos, no quieren admitir, los decretos que beneficiarían a las mayorías, ni siquiera en defensa propia, porque se indignan de la violencia de la delincuencia organizada, CUANDO ELLOS son los promotores de una violencia económica de mayor virulencia, con sus decretos genocidas.
El “aumento” salarial es uno de ellos, pero no el único ni el más grave.
Es uno de cientos que se han vuelto USOS Y COSTUMBRES de los oligarcas.
La verdadera “amenaza para México” es: El decreto fáctico.
El Jefe Diego en uno de esos decretos.
En sí mismo, es un ejemplo de los USOS Y COSTUMBRES OLIGARCAS.
Es un Sancho Panza, que se cree Quijote.