¿Educación de calidad para desempleo y/o salarios esclavistas?
Entrenamiento previo para desempeñar cualquier trabajo.
Testimonos: Blog. Un futuro, con futuro, para México.
Por Cipriano Barreto Mendoza.
Denise Dresser, en su artículo en Proceso: Educando para la mediocridad (22-dic-2010) enfatiza el papel que la educación tiene en el “éxito” económico de un país.
…”En un mundo globalizado, el éxito estará definido por individuos y sociedades, que logran adaptarse con velocidad y cambiar sin oponer tanta resistencia”.
En la realidad, el auge económico tiene poco que ver con la educación y más con la voluntad “humana”, de someter a otros seres humanos.
La “educación” actual, busca justificar cultural e intelectualmente, esa explotación.
En el caso de México, se habla de educación de calidad, cuando esta “calidad” está sometida, a los intereses de los Poderes Fácticos.
Lo está, porque si no fuera así, desde hace años (93) se hubieran cumplido las leyes constitucionales, que garantizan un salario mínimo para el desarrollo digno del trabajador(a) y su familia.
Por el contrario, desde hace 93 años se viola el mandato constitucional del Art. 123, Párrafo Tercero.
Desde hace 93 años, por decreto de los poderes Fácticos se imponen salarios coloniales y/o francamente esclavistas.
Obligando a la migración, al desempleo, la delincuencia y/o la subocupación. O todas juntas.
La educación no debe imponerse por decreto, al menos la Universitaria y o Técnica de Alta Especialización.
La Educación Básica: Elemental, Primaria, Secundaria y Preparatoria deberían de ser obligatorias, con el añadido de que estas tres últimas deberían tener un fuerte componente con las Ciencias Técnicas o al menos igual con las Básicas: Gramática. Aritmética, Geometría y Sociales.
Las Ciencias Técnicas, desde los inicios educativos, serían para encausar al estudiante sobre su(s) vocación(es) PROFESIONAL(ES) a futuro.
La orientación vocacional sería fundamental en los primeros años no sólo en lo técnico, sino PRINCIPALMENTE, en lo HUMANÍSTICO.
Con este bagaje educativo, el graduado debería encontrar un trabajo y un ingreso, suficiente para vivir con dignidad la vida, independientemente de que no se tenga una educación universitaria o especializada.
Ésta sería una meta personal o de superación, sin imposición estatal pero con todas las facilidades para que se alcance, por así convenir a la sociedad y al país, en su conjunto.
Los ingresos para estos universitarios o especialistas, serían mayores a los bachilleres, pero no en demasía. Dos o tres ingresos serían la recompensa.
Así, tendríamos una sociedad clase mediera universal sin una igualdad totalitaria en lo económico, con las desigualdades propias de cada ser humano en lo particular o de las sociedades en lo general, pero sin los abismos económicos, políticos y sociales actuales.
La educación, en los niveles universitarios y especializados, sería de alta calidad, porque dentro de la sociedad, existen los individuos, particularmente dotados del genio, para la alta especialización universitaria.
La educación básica, debe ser suficiente para recibir un ingreso con poder de compra, para llevar una vida digna.
En un sistema económico como el actual, no sólo la educación básica sino inclusive la universitaria y aún la de alta especialización, no son garantía para la movilidad social.
El desempleo y los bajos salarios, actualmente, no sólo daña a los de baja preparación educativa, sino también, a los muy preparados.
En la economía real, no es necesario tener una educación de calidad para DESEMPEÑAR UN EMPLEO, puesto que el trabajo, salvo los primeros días, será rutinario con el tiempo.
Con un entrenamiento adecuado, cualquier puesto se puede ocupar, si se tiene la educación Básica, sin necesidad de tener una educación de calidad.
Esto es sólo un pretexto para pagar bajos salarios de supervivencia, o para generar empleos con salarios ínfimos con preparación educativa “excesiva”.
La Seguridad Social Universal, sería un derecho de todo mexicano, por el sólo hecho de serlo, SIN IMPORTAR SU ESTADO LABORAL.
De igual forma, cualquier mexicano con Educación Básica, DEBE CONTAR CON UN TRABAJO Y RECIBIR UN INGRESO CONSTITUCIONAL POR EL MISMO, INDEPENDIENTEMENTE DE SU NIVEL EDUCATIVO.
La educación de calidad, empieza por contar con un empleo seguro y con prestaciones, después de la graduación Básica.
Y también, después de la graduación Universitaria o de Alta Especialización Técnica.
