sábado, 30 de enero de 2010

Ni Presidente del Empleo, Ni presidente Ciudadano. Simple Comparsa de la clase económica. Testimonos.Super Ciudadano....Testimonos



Testimonos

Por Cipriano Barreto Mendoza

Al igual que José López Portillo, el presidente Calderón trata de rescatar su imagen personal, ante el inevitable juicio de la Historia y el de los mexicanos. La única diferencia es que el auto llamado “presidente del empleo” se adelantó 3 años a su par, quién lo hizo al cuarto para las doce, en su último informe y con el presidente electo, Miguel de la Madrid Hurtado, sentado y molesto, por la nacionalización de la Banca, decretada frente a su nariz. La clase política, entonces priísta, la aplaudió.
Calderón, durante su campaña electoral, hizo muchas promesas, todas incumplidas y lo que no prometió, ni fueron temas de campaña, como la guerra contra el narcotráfico (más de 15 mil muertos) y el ahora enarbolar las demandas ciudadanas contra la clase política, son las que pone como prioridad en su agenda “gubernamental”.
En Testimonos anteriores, he señalado que si el mandatario quería “rebasar a AMLO por la izquierda”, debería haber declarado la guerra a todas las injusticias que padecen las mayorías en este país, empezando por revertir la salvaje y criminal concentración de la riqueza (20 % acapara 70% del PIB) y el cumplir con la Constitución y que los trabajadores reciban sueldos y salarios que respeten el mandato de la Carta Magna, que conmemorará un año más de incumplimiento y de cotidiana y cínica violación.

El fracaso electoral de julio pasado lo terminó de convencer de que su gobierno estaba más que fallido y no, por una crisis mundial que sólo nos iba a dar un “catarrito” y que se convirtió en una caída del PIB de 7%, tampoco por los pésimos manejos de su “gabinetazo” respecto a la crisis del virus AH1N1 y que los daños causados no fueron por éste, sino por el manejo político electoral que sobredimensionó sus estragos, para levantarse cómo los “salvadores de la Humanidad” y por supuesto, de México.
Ahora, y dentro de la misma conducta mesiánica, se quiere presentar el ejecutivo como el salvador de las demandas ciudadanas y cómo el líder de los electores que no se sienten representados por esta clase política, que sólo ve por sus intereses y muy, pero muy poco, por los de la población, en crisis extrema.
En encuestas recientes, lo que más preocupa a la sociedad, es la economía, después la seguridad y en tercero, la política pero, ocuparse de llenar los bolsillos (y los estómagos) de la gente, representaría afectar los intereses globales de la clase económica que es la que mueve y maneja a la clase política a su antojo y en su beneficio.
La clase política, manipulada por la clase económica, para proteger los privilegios de sus patrones, acepta ser el receptáculo del reclamo justificado de la sociedad y para cubrir las espaldas y las Bolsas cupulares, exhibe “reformas políticas” por doquiera buscando distraer no a los bolsillos (y estómagos) de la gente sino a los analistas y politólogos que no tienen ese vacío en su vestimenta, ni el ajeno gruñir visceral.
Calderón, recogió varias de esas demandas políticas (desechando otras) y cómo fiel escudero de la clase económica, a la que le debe el puesto, en un Decálogo las presentó en diciembre, cuál broma del día de los Inocentes para los millones preocupados por la situación de desempleo, salarios de hambre e inflación galopante, creyendo que con ello se olvidarían de comer tres veces al día y bajo un techo seguro.
La intención de Calderón, con su Decálogo, no sólo está en desviar la atención de la responsabilidad compartida de la clase económica en la crisis global, sino en la crisis centenaria de los indígenas, que tienen 500 años marginados y en los 40 años de los trabajadores sin salarios constitucionales pues la intención prioritaria del ejecutivo (por la gracia de Gordillo e IP) está en recoger las banderas de los pocos ciudadanos que satanizan a la clase política pero deidifican a la clase económica, dueña y señora de las instituciones (incluyendo la Presidencia de la República) y del 70% del PIB.
México tiene 40 años de “reformas políticas” que han servido de cortina de humo, para golpear las incipientes reformas económicas que promovió la clase política pos revolucionaria. A cada “reforma política” le siguió un descontón a los beneficios sociales y económicos. Entre más “se avanzó” en lo político peor le fue a la sociedad en lo económico.

La clase económica estaba complacida con esos “avances” para la clase política, que le significaba acaparar más puntos de la riqueza nacional, por ello siempre avaló las “reformas” y con mayor poder económico se convirtió en el soporte de las campañas electoreras del PRI. Recordemos que Carlos Salinas de Gortari, le pasó la charola a los magnates del momento, pidiendo 25 millones de dólares por cabeza para gastos electorales (adelantándose a Bejarano). A partir de entonces, cada partido con posibilidades de ganar puestos públicos, mediante elecciones, pasó la charola y recibió aportaciones de la clase económica que así compró lealtades y complicidades.

Estas últimas son las que han inclinado la balanza hacia la clase económica, pues con mayor poder adquisitivo, ha comprado voluntades de la clase política, al grado de que los poderes fácticos son los dueños y señores de la clase política y de las instituciones que dice representar.
Finalmente, Calderón cómo “cabeza’ de la clase política, lanza un Decálogo Político para salvar su imagen histórica, cuándo lo que urge es un Decálogo Económico. ¡Sólo con ello, podría corregir su estampa tan fallida! ¡Urge un Líder Ciudadano de verdad, no uno de mentiritas, o cómo se dice ahora, espurio!

viernes, 29 de enero de 2010

Poderes Fácticos versus el rebelde Obama, el "hijo Desobediente"



Testimonos

Por Cipriano Barreto Mendoza

En un Testimonos anterior, aplaudía la Reforma financiera aprobada en la Cámara de Representantes en los EUA y me preguntaba si también pasaría la aduana de la Cámara de Senadores que es la Cámara de Cabilderos de las Grandes Transnacionales y son los que en realidad gobiernan a nuestros vecinos y “socios” y por añadidura, a toda América Latina y el Caribe ( con dos o tres excepciones).
El Presidente Barack Obama, cuándo pedía el voto al Plan Bush, de rescate inmobiliario y financiero por 800 mmdd, en lugar de rescatar a la clase media (mediante mejoras salariales substanciosas y el congelamiento temporal de los embargos de casas y la suspensión de los despidos masivos por un año y dependiendo de las ganancias habidas o no por la empresa, en los dos o tres años fiscales anteriores) condicionó el apoyo a las grandes empresas a que tendrían que regresar, cada dólar, al bolsillo del contribuyente.
Varios comentaristas consideraron esta promesa como una más, destinada a ser incumplida. Afortunadamente el Presidente Obama mantuvo su palabra y en menos de un año, algunos bancos han devuelto parte del rescate, para evitar la fiscalización y la intervención del gobierno en sus Consejos de Administración. Igualmente se propone implementar un impuesto fiscal para que, en diez años, los “gigantes” rescatados, reintegren el monto total del rescate.
Estos mecanismos contrastan notablemente con los que se implantaron (se impusieron) en México, con el Fobaproa, que en lugar de que los Bancos regresaran el rescate, después de 12 años, los ciudadanos están pagando montos que en sus inicios fueron de un 20% de PIB (según Zedillo) y que actualmente se encuentran entre un 5% a 6% del PIB.
Lamentablemente, en lugar de que los financieros agradezcan, que no se les metió a la cárcel, han emprendido una embestida en contra del mandatario y su gobierno, acusándolo de socialista y de mal agradecido, pues consideran que de haberlo querido, podrían haberlo dejado fuera del camino a la Presidencia. “Obama un peligro para EUA”.
Las democracias occidentales, han sido secuestradas por los poderes fácticos desde hace dos siglos y sólo en contadas ocasiones, frente a crisis o circunstancias colosales, los gobernantes se han mantenido fuera del dominio fáctico. Es posible que nos encontremos en una de esas escasas y raras coyunturas, en que la sociedad genera un golpe de timón y se sobre pone a estos entes. Las estructuras políticas y sociales han provocado cambios drásticos y ejemplares a las estructuras de poder económico, quiénes cuantitativamente han dominado a las primeras, en los últimos 40 años.
Al cuento neoliberal de que “el mercado se podía auto regular” y después de los crímenes globales de que fue capaz, hoy nos encontramos con la idea, no contraria sino la única lógica, de que al lobo hay que ponerle un bozal, pues de lo contrario, terminará por devorarnos, y eso fue lo que ocurrió.
Esta crisis global, retrasó el desarrollo de la humanidad unos 5 años, en los países “ricos” y por lo menos l5, en los “emergentes”. La regulación del mercado es urgente y necesaria pero además, debe de ser moral y este adjetivo debe revolucionar todas las estructuras y las instituciones, para continuar un capitalismo social que se dio, inicialmente en los mismos EUA, después de la Segunda Guerra Mundial y hasta el gobierno de Reagan.
En esa época, se dio la contradicción de que en lo económico (mayoritariamente) y en lo social (parcialmente) se entró en una fase de un capitalismo social mientras que políticamente se dio un endurecimiento en contra de todo lo democrático y no se diga, de lo socialista.
El temor a una segunda Cuba en LA y el Caribe, originó el holocausto de la limpieza ideológica que generó los golpes de Estado y el predominio de las dictaduras y de las dictablandas en todo el Nuevo Mundo. Los gorilatos sostenidos por el FMI y el Banco Mundial, fueron el anticipo cínico y descarado del neoliberalismo, del capitalismo salvaje y de que el mercado se podía auto regular.
La crisis global que trajeron estos mitos, debe revertirse, pero dando un salto cualitativo, que nos proyecte hacia el futuro de un socialismo humano que, primero pase por la etapa de un capitalismo moral, humano, ecológico y sustentable.
La regulación sin concesiones, del sistema inmobiliario y financiero en los EUA, debería ser un buen anticipo y un inmejorable ejemplo para el total de las economías.
Esperemos que las cúpulas no le echen montón a Obama y que, por el contrario, mandatarios cómo Sarkosy, levanten la mano y apoyen al verdadero “hijo desobediente” de los poderes fácticos.

sábado, 23 de enero de 2010

Ciento cincuenta Haitíes abandonados


Testimono

Por Cipriano Barreto Mendoza

En la ONU hay casi doscientos países inscritos (192). De ellos, más de 150 están en igual o peor situación que Haití. En un programa de CNN en español, con motivo del Sorteo del Mundial de Futbol en Sudáfrica 2010, se presentó un reportaje sobre el abandono de recién nacidos en las Ciudades principales de este país sede de la Fiesta balompédica.
En zonas críticas, se localizan ‘”ventanas” con un letrero que señala que ahí se pueden “dejar” niños. La “ventana” tiene una puerta que se levanta y da acceso a un nicho con una colchoneta, dónde se puede colocar al niño y en ocho segundos, del interior del lugar, acudirá personal que lo recogerá, gracias a un dispositivo de alerta.
Mientras el gobierno sudafricano “invierte” miles de millones de dólares en estadios, albergues para los participantes, vías de acceso y en seguridad pública, en el tejido social se da este contraste de la miseria existente en la población mayoritariamente negra.
Otro reportaje, de la misma cadena, denuncia que en esta población golpeada por la pobreza tiene, además, una grave incidencia de Sida y en la extrema ignorancia, en que se tiene a la gente, existe la creencia, de que tener relaciones sexuales con una virgen, se puede curar este mal.
Estos reportajes muestran, cómo países con graves carencias en lo más elemental, se ven presionados a “invertir” en campeonatos mundiales, que poco influirán en mejorar el nivel de vida de la mayoría. Se puede argumentar que el organizar un Mundial de Futbol, atraerá la atención de los inversionistas y de otros grupos para traer capitales y fuentes de empleo para la gente, pero ello no es sino la zanahoria que se ofrece, para desviar la atención hacia actividades que sólo producirán ganancias contantes y sonantes e inmediatas, para las cúpulas relacionadas con la FIFA.
En Haití, los ojos del mundo están puestos, por una tragedia que al igual que un Mundial de Futbol es un espectáculo no para mostrar nuestras habilidades con el balón, pero si para mostrar nuestro buen corazón y el altruismo de muchos sectores, que no lo hacen en la vida diaria, ni con sus propios connacionales.
No estamos en contra de la generosidad en casos de desastre. Censuramos que no sea una constante o con cierta frecuenta en los hechos cotidianos. La preocupación por los niños huérfanos o en extrema pobreza, debería ser permanente y no sólo en los desastres.
Estas tragedias naturales, tienen distintos desenlaces y consecuencias dependiendo en que país se dan. Si son en un país rico los daños serán infinitamente menores que si ocurren en uno dejado de la mano de Dios pero también de los hombres y eso es lo que está ocurriendo en Haití pero no ahora, después del terremoto, sino desde centurias.
Este abandono se da en por lo menos un centenar y medio de países, a los que se les ve como botín de corsarios por los filibusteros de las finanzas y del comercio.

El capitalismo salvaje que nos ha llevado a esta crisis global,
es un terremoto cien veces más destructivo que el que azotó a Haití, pero pocos alertan de sus tremendas consecuencias y daños que dejarán en más de ciento cincuenta países, que multiplicarán por ese número las tragedias en las sociedades víctimas de la explotación del hombre por el hombre, que sólo en los desastres espectacularmente mediáticos, se despoja de su egoísmo y voracidad y deja ver, sólo superficialmente, su generosidad y desprendimiento para con su propia especie

sábado, 16 de enero de 2010

La Dictadura Bancaria y el saqueo institucional permanente?




Testimonos

Por Cipriano Barreto Mendoza

Los que creyeron que después del Robaproa, los banqueros dejarían de saquear los bolsillos rotos de la mayoría de los mexicanos, satisfechos de los suculentos intereses que reciben por el rescate de la banca, es que no conocen la enorme capacidad de estos tiburones, para idear nuevas formas de saquearnos y también la discapacidad de los usuarios para desenmascarar y resistir los nuevos garlitos y trucos piramidales de que se valen estos genios de la usura y la estafa legal, pero completamente inmoral.
No hace mucho tiempo, en los bancos se podía abrir una cuenta de ahorros y los intereses que generaba, sin ser abundantes, no eran tan miserables cómo los actuales. Hoy, uno o dos por ciento anual (menos que la inflación oficial) es lo que llegan a generar pero, si esos mismos ahorros los prestan, los intereses que reclamará el banco para sí, sobre pasará más del 50 por ciento anual.
Los bancos encontraron, que por tus ahorros, en lugar de que te den el uno o dos por ciento (ganancia) pagues más de un 35% (pérdida). ¿Cómo consiguieron eso? Simplemente con una tarjeta de débito. El ahorrador deposita obligatoriamente mil pesos para abrir la cuenta y pagas una comisión por esa apertura, pero por cada retiro menor de esos mil pesos, habrá una comisión dependiendo del monto y habrá otra comisión por no tener mil pesos constantes en la cuenta y la comisión será mayor, entre mayor sea el diferencial entre tu saldo y los mil pesos fijos que debe tener. Si quieres un papel (comprobante) con tu saldo también habrá una comisión en tu contra y si deseas cancelar esa tarjeta, mal llamada de débito (cuándo debería denominarse tarjeta de ahorro o de hábito, o de haber) tienes que pagar una cantidad que es variable y dependiendo del banco emisor.
De no haber depositado tus mil pesos y de no recibir esa tarjeta a cambio, hubieras evitado todas estas comisiones que a final de cuentas te comerán, mínimo, un 35% de tu efectivo.
Algo parecido ocurre con las tarjetas de crédito, pero aquí el banco te presta dinero y sería justo que tuviese alguna ganancia pero no en los montos actuales que sobrepasan el 50% y llegan hasta el 80 o 90 %. No se te ocurra pagar el monto mínimo, porque entonces la deuda se convertirá en impagable.
La Banca, en últimas fechas, ha sido obligada a premiar al usuario cumplido, con menores tasa de interés, pues era obligado a pagar tasas mayores bajo el argumento de que tenían que cubrir el rezago de los incumplidos, es decir pagaban justos por pecadores, pero examinando las utilidades que obtienen a nivel mundial, son mayores que en sus países de origen, es decir que son abusivos en exceso porque ellos dictan sus “regulaciones” y el “gobierno” se lo permite. La dejadez de todos los sectores pero, particularmente de las autoridades, han dejado que los banqueros sean juez y parte en el monto de sus ganancias y de que se despachen con la cuchara grandísima.
Los bancos se han convertido en indispensables por los bajísimos ingresos que reciben los trabajadores, que tienen que recurrir a ellos para cubrir sus necesidades o para cubrir la imagen de status que exige el Sistema. El gobierno al no pagar los salarios constitucionales de Ley, encamina obligadamente a los trabajadores a endeudarse mediante préstamos directos o préstamos diferidos con las llamadas tarjetas de crédito por montos pactados.
El Sistema, al no pagar salarios constitucionales a los trabajadores, impide que las Pymes puedan desarrollarse y al poco tiempo, el “financiamiento” otorgado a ellas (ya sea con intereses bajos gubernamentales o los altísimos de los privados) las llevarán a su defunción.
Mientras no se tenga consumidores con ingresos a la mitad de los EUA, las Pymes tardarán más en nacer que en pasar a mejor vida. Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo, ha señalado en cuanto foro se presenta, que las Pymes para que no mueran “necesitan financiamiento y poca regulación” pero le faltó añadir lo principal, que los consumidores que sean su mercado natural, tengan poder de compra, y esto no podrá ocurrir, si sus posibilidades como consumidor no pase del día a día.
La Banca en los últimos 6 sexenios, se ha enriquecido sin cumplir sus labor de financiar al sector productivo sino en el de convertirse en un socio forzoso que se lleva un 50% de las ganancias, más de lo que podría recibir un emprendedor y 10 veces más que el gobierno por impuestos. La banca es un parásito no sólo por las entregas impunes de recursos vía el Fobaproa, sino por todas las “pirámides” inventadas en su seno y que atrae a ingenuos con el señuelo de que tener una tarjeta es símbolo de estatus.
En los últimos anuncios de este sector, le asegura al usuario de tarjeta que no se preocupe de que tras el cajero automático se encuentre una delincuencia organizada que le vacie sus fondos, pues están protegidos por un seguro o una garantía pero ¿Quién protege al usuario, de los ladrones y timadores que son los propios banqueros?
La crisis mundial, que acosa a nuestros países tuvo varios anticipos en América Latina y en México se dio con las diversas crisis devaluatorias y bancarias, en que nuestras “autoridades” fueron manipuladas para favorecer tanto intereses foráneos como locales. Un ejemplo de estas desgracias, lo fue el llamado rescate de la banca conocido como el Fobaproa, que socializó las perdidas bancarias a la población pero privatizó las ganancias a los banqueros.

Tanto en México como en los EUA,
las crisis se dieron porque los banqueros utilizan dos criterios para conceder préstamos: Uno muy riguroso y estricto para el emprendedor común y otro para las empresas propias o asociadas alrededor del banco X.

Para estas últimas, se aflojaron todas las medidas y se concedieron préstamos sin las garantías necesarias y en la mayoría, sin ellas. El resultado es obvio, en el momento de la quiebra, la magnitud del fraude es tal, que pone en riesgo a toda la economía en general y el “gobierno” cae en la trampa y se ve obligado a rescatar a los defraudadores, inyectándoles recursos que pagarán, finalmente, los ciudadanos.
En ocasiones, hay pequeñas diferencias, pero que hay que mencionar: En los EUA en menos de un año, los bancos rescatados devuelven parte de la ayuda, porque el “gobierno’ tiene alguna participación en las administraciones y los accionistas quiere deshacerse de estas injerencias; en el caso de México, el “gobierno” se mantiene al margen sin intervenir en el Consejo de administración y sin corregir y/o castigar los errores y/o delitos cometidos y DESPUES DE 16 años aún se les sigue entregando recursos de la sociedad sin recibir a cambio beneficio alguno, por el contrario, los banqueros rescatados buscan métodos electrónicos, para seguir saqueándonos con tecnología de punta y con la complicidad del Sistema.
Obama en su discurso de Año Nuevo, señaló que los banqueros tendrán que devolver cada dólar que los contribuyentes les dieron para salvarlos. En México, después de 14 años del Robaproa, estamos entregando el 5% del PIB (16% en sus inicios, Zedillo confesó en Davos que fue 20% del PIB). La banca nos sigue saqueando por todos lados, a ciencia y complacencia de las “instituciones” controladas y manipuladas por los Poderes Fácticos, entre los cuáles, ésta es uno de sus carteles, de delincuencia organizada, más representativos y sin tirar un solo tiro. ¡Saqueo limpio e impune!

viernes, 15 de enero de 2010

El "complo" y las "pirámides" del TLC: Los modernos jinetes del apocalipsis.


Testimonos

Por Cipriano Barreto Mendoza

La reunión “cumbre” en Guadalajara, de los países firmantes del TLC, no dejó compromisos por cumplir, que lleven alguna ventaja para los pueblos. Particularmente para el nuestro, que de los tres, le tocó bailar con la más fea, tal cómo estaba en el guión diseñado por los grandes consorcios internacionales y qué, aun cuando desde los inicios de la firma, se anticipaban los desastres para nuestra economía, en algunos sectores productivos se tenía la esperanza de que junto con los males llegarían algunos bienes y que estos compensarían con creces a los primeros.
Esta esperanza pronto se desplomó, pues la firma del acuerdo comercial, multiplicó los daños a la planta productiva y del empleo. Las promesas de mejores empleos y mejores sueldos, quedaron en sólo promesas incumplidas y no solo eso, sino que no permanecieron estables, por el contrario unos y otros, cayeron en picada, cómo no se había experimentado antes y que sólo el control oficial de las estadísticas, las pudo ocultar por algunos años, pero ya sabemos que no se puede esconder esta situación por mucho tiempo y menos eternamente.

Cuatro grandes sectores de la economía:
El aduanero, el transportista, los bancos y los de seguros, le agregaron costos a los productos y satisfactores que nos llegaban por la vía legal, pero artificial sin que, por ello, acabaran con el contrabando y la piratería acostumbrada.

Los productos que deberían llegar más baratos del exterior, en realidad se encarecieron por los costos de estos servicios impuestos por la ideología neoliberal que nos vendió la idea de que “la distancia más corta entre dos puntos no es la recta, sino una espiral”.
Según los gurús económicos y académicos, el producto que se fabricara en Chile o en China, al importarlo, nos saldría más barato que hacerlo en Durango, Michoacán o Chiapas.
El absurdo, es más que evidente, pero estas grandes empresas prestadoras de servicios complotaron para convertir esta mentira, del tamaño de un catedral, en una verdad incuestionable, igual que el cuento del capitalismo salvaje de que “el Mercado se puede regular por si mismo”.
Estas falsedades evidentes, han sido respaldadas por 20 años en nuestro país y por más de 35 en los países “desarrollados” y que, finalmente, se ha visto golpeados por las consecuencias de estos mitos económicos, llevados al absurdo pero no con la extrema gravedad en que están siendo afectados nuestros países “emergentes”.
Igual como ocurre con las “pirámides” financieras, los países que patentaron estos cuentos económicos, obtuvieron ventajas múltiples y $u$tancio$a$ del engaño y la mentira por ser los promotores, mientras que los que llegan después, en lugar de recibir las ganancias prometidas, lo que reciben es la explosión de la burbuja del timo y la trampa y, por supuesto, igual que en las pirámides, son los que sufren todas las consecuencias y los daños.
Las evidencias saltan a la vista, los países ricos vivieron durante 30 o 35 años del cuento y hoy están en recesión pero por lo menos en ese tiempo gozaron de las mieles de su mentira mientras que los países que llegaron tarde al reparto del botín, son los que pagarán las consecuencias sin disfrutar de los deleites del “compló”.
En los hechos, las agencias aduanales, las líneas transportistas, los grupos financieros y las compañías de Seguros fraguaron una pirámide miles de veces más costosa que la de Madoff (o la de Stanfford) que se calcula en un timo de 50 mil mdd. Los daños, los crímenes institucionales de estos modernos jinetes del Apocalipsis superan, cientos de veces, a la suma de todos los hechos delictivos del crimen organizado. ¡De tal dimensión catastrófica es el tsunami del cuento del TLC, para los pueblos!
Así como aceptamos el mito de que “el mercado se podía auto regular” de igual manera nos tragamos la rueda de molino de que “la distancia más corta entre dos puntos no es la recta, sino la espiral del TLC”.
De todas las promesas que traería, ninguna se cumplió y a cambio, todas las sospechas de un genocidio económico se cumplieron, lamentablemente, con pilón y copeteado.

sábado, 2 de enero de 2010

El Quinto Jinete del Apocalipsis: El Tratado de Libre Comercio


Testimonos

Por Cipriano Barreto Mendoza

Nuestro País ha sido víctima de varios “complós”, diseñados y ejecutados por un gobierno que no puede renunciar a su naturaleza del “Destino Manifiesto”. Su vocación imperialista ha impedido, por las “buenas” y por las malas, que México y toda Latinoamérica y el Caribe se equivoquen o acierten, en la construcción de su futuro.
La independencia de los EUA, de la Corona Inglesa, trajeron para nuestros pueblos nuevas cadenas prestas a sustituir a las que nos mantenían sujetos a los Imperios Europeos.
Aunque Latinoamérica buscó forjar su propio destino, en muchos casos contrarios al liberalismo que se construía en Europa, las cúpulas autóctonas decidieron mantener el statu quo, que significaba analfabetismo y sobre explotación del 90% de la población fundamentalmente indígena y mestiza. Los españoles, peninsulares y criollos se dividieron en mantener las cosas o en abrirse a los nuevos tiempos.
Nuestros pueblos se polarizaron, por las corrientes antagónicas que se daban en las cúpulas. Los bandos buscaron atraer a las masas con señuelos religiosos o de mejoras en su situación económica y social.
En México, se levantó como estandarte a la Virgen de Guadalupe y se habló de liberar a los esclavos y del reparto de tierras. De todas las promesas, sólo se cumplió el tutelaje de la morenita.
Aunque las colonias españolas y portuguesas tenían enormes ventajas territoriales y económicas sobre las inglesas y francesas, éstas tenían una ventaja ideológica: la de la Revolución Francesa. La ruptura del orden existente monárquico y romano, liberó nuevos demonios y ángeles que pronto asimilaron, en lo que les convenía, las Trece Colonias Inglesas quiénes con su independencia, adaptaron las nuevas ideas a sus intereses expansionistas.
La independencia de unos significó la nueva esclavitud de otros. Por su incapacidad de leer los nuevos tiempos. Mientras las excolonias inglesas evolucionaban en algunos asuntos clave, en las excolonias hispanas se trató de resucitar al viejo régimen.
El resultado es que nos hicimos más vulnerables y nuestra “independencia” se hizo de papel.
La Revolución Mexicana, trató de levantar un puente entre lo viejo y lo nuevo, pero de nueva cuenta, el impulso independentista que existía en nuestra sociedad se vio frenado y totalmente desviado por vientos no liberales sino neoliberales que le daban un peso enorme al fraude ideológico de que “el Mercado podría autorregularse”. Esto significaba que el mercado iría contra su naturaleza de “buscar la máxima ganancia, con la menor inversión”. Al satanizarse la intervención del Estado para regular a las fuerzas del Mercado, se desataron todos los demonios y se encerraron los pocos ángeles, que habían dado una salud, educación y un relativo crecimiento del PIB del 6% durante 12 años (1958-1970). Los sexenios de Adolfo López Mateos y de Gustavo Díaz Ordaz.
Un abogado y no un economista, Antonio Ortiz Mena fue el arquitecto del milagro mexicano que fue saboteado por los economistas educados en las principales universidades de EUA y que fueron impulsados a los primeros puestos del País, la Presidencia de la República inclusive, para dar al traste con nuestro desarrollo y justicia social, para dar paso galopante, a la concentración del ingreso y al desplome de todas las mejoras evidentes, económicas y sociales, pero con un, también evidente, control político de un partido hegemónico: el PRI.
Los avances económicos y sociales, no estaban correspondidos con los políticos y ese fue el argumento real, para trasformarlos pero a costa de los primeros. En lugar de mantenerlos, se les aplicó el freno y se dio todas las libertades, habidas y por haber, a las Reformas Políticas mientras que la Economía y lo Social se iban a pique, por la falta de una conciencia ciudadana que mantuviera sus banderas o que no las cambiara por un plato de curules y puestos públicos.