viernes, 29 de julio de 2011

La disputa por la Nación.

La disputa por la Nación. Consecuencia de la disputa por el Mundo.
Globalización criminal, rebasa a las naciones. Presente, siempre.
Enfrentamiento entre neoliberalismo y nacionalismo, sólo de matiz.
Concentrar o distribuir, es el dilema. Explotar o regular.
Prioridades: Mercado o Estado; Mercado Externo o Interno.
Neoliberalismo y nacionalismo: No iguales, pero lo mismo.
Concentración de riqueza y salarios coloniales. En uno y otro.
Alternativa a ambos: Que el hombre deje de ser el lobo del hombre.
Testimonos: Blog. Un futuro, con futuro, para el Mundo.
Por Cipriano Barreto Mendoza.
La globalización que se dio con las Guerras Mundiales, apenas se reconoce, casi un siglo después.
Los EUA, mantuvieron un aislamiento, que rompieron con su participación en los conflictos llamados, acertadamente, mundiales.
Desde que los imperios europeos y el estadounidense, trataron de colonizar el Mundo, ya se hablaba de internacionalización y de nacionalismos.
“La Internacional”, fue el canto de los partidarios del socialismo y del comunismo.
Desde los tiempos más remotos, ya existía la confrontación entre lo particular y lo social, lo local y lo regional, la Patria chica y la Patria mayor.
Sorprende entonces que, hace 30 años con el ensayo de La disputa por la Nación, de Rolando Cordera y Carlos Tello, no se dieran cuenta de que en el Mundo existían dos corrientes político-económicas, conocidas como: Imperialismo y nacionalismo.
Ambos con ambiciones de imponerse globalmente.
El concepto de nación era muy distinto dependiendo del Poder económico y militar que se tuviera.
Las naciones imperialistas trataban de sojuzgar al resto de las naciones, particularmente a las vecinas o a las que tuvieran algún recurso explotable.
Las naciones, por tanto, se dividían en: Imperios y colonias.
La esclavitud, durante siglos, fue una empresa transnacional, de Inglaterra pero también de España, Portugal, Francia, etc.
Por ello, sorprende que la globalización que ya se daba, desde el descubrimiento de América, sólo fuese reconocida como tal, varios siglos después.
La invención de la máquina de vapor, primero y del motor de combustión interna, después y en general, el desarrollo de los medios de transporte y de comunicación facilitaron el crecimiento global, pero con explotación y desigualdad, también global.
Con el descubrimiento del continente americano (1492), el Papa Alejandro VI, lanzó una Bula, para repartir el Nuevo Mundo, entre España y Portugal (1493).
Una línea imaginaria a 100 millas de las islas Azores, de norte a sur, entre los polos fijaría las conquistas entre dos Imperios: España, al oeste y Portugal, al Este.
Inglaterra, cuyo Rey, era a su vez el mandamás de la iglesia anglicana que no obedecía los designios de Roma, empezó la disputa de América, 7 años después, en 1500.
Años más tarde, Holanda y Francia, participaron del Botín Americano, desapareciendo la primera, por el poderío inglés.
Para saquear, más rápido y furioso, el continente, se importaron esclavos de las costas africanas, por millones, pereciendo, también por millones, en los asaltos a las aldeas, en las travesías, y en las jornadas exterminadoras en los campos de azúcar, algodón y tabaco.
El genocidio en las minas, era diez veces mayor, que en la agricultura.
Lo barato y la facilidad, para adquirir, esclavos lo permitía.
Con la prohibición de la esclavitud, dos o tres siglos después, con la Revolución francesa y las normas napoleónicas, la esclavitud no desapareció, sino que se sustituyó, con la esclavitud parcelera en el campo y la salarial, en las ciudades industriales.
Con la invención de las máquinas y su empleo tanto en el agro cómo en las fábricas, lanzaron a la calle a los trabajadores, con la esclavitud del desempleo.
La grandeza territorial y poblacional de EUA y los océanos, Atlántico y Pacífico permitió una autarquía y se practicó un aislamiento respecto al Mundo, no americano.
“El continente de la esperanza”, a semejanza de una Bula Papal, se lo había adjudicado en exclusiva, el Neo Imperio.
El Destino Manifiesto y la Doctrina Monroe, fueron las Bulas teóricas, iniciales y “la diplomacia de las cañoneras”, los Marines”, las Compañías, el anticomunismo, las dictaduras civiles y militares, el narco terrorismo (hoy), fueron las Bulas prácticas, en la apropiación de Wall Street, de las naciones latinoamericanas.
Dentro de nuestros países, desde sus orígenes coloniales, luego independentistas, después reformistas, revolucionarias y pos revolución, existió una polarización, una disputa por la Nación entre conservadores y liberales.
En 1981, la disputa por la nación, la protagonizaban los neoliberales y nacionalistas.
Ambos planteaban proyectos capitalistas con regulación estatal de ambos, pero los neoliberales no lo querían reconocer, mientras que los nacionalistas, abiertamente, lo pregonaban.
La participación del Estado, en la política neoliberal, no es, ni ha sido, marginal. Pero.
Así, lo han vendido los MMC.
Por el contrario, el Estado impone el neoliberalismo, con un mayor peso y Poder, porque la mayoría de los integrantes del mismo son (verdad de Perogrullo): Neoliberales.
Los nacionalistas, que abiertamente declaran que el Estado sea un regulador y atemperador de la riqueza y la pobreza, pese a que son los más, poblacionalmente hablando, no son mayoritarios dentro de los integrantes de las instituciones del Estado.
Los que se benefician del actual estado de cosas, desigualdad e injusticia, así cómo concentran la riqueza, también acaparan los puestos de toma de decisiones.
La clase política, debería tener o representar a todo el mosáico de la población y siendo más, los desposeídos, teóricamente deberían ser más los legisladores. Pero.
Ocurre todo lo contrario.
Los legisladores, “representantes” de los marginados, votan políticas económicas, en su contra.
Así ha sido los últimos 30 años con el neoliberalismo priista, perredista y azul.
Por eso vemos, aberraciones económicas como el Fobaproa-IPAB, el que PEMEX, pague los impuestos que deberían pagar las grandes empresas, los gasolinazos, los salarios inconstitucionales, salarios coloniales y esclavistas (15 veces menores a EUA), tratados comerciales causantes de desempleo, bajos ingresos y productos más caros que en el exterior y que mantiene, vigente, el contrabando que decían, se acabaría con el TLC.
El acceso a las tomas de decisión del Estado, cuenta con filtros que no permiten el arribo de políticos nacionalistas o con vocación social, sino a arribistas, que se dicen de izquierda o que dicen buscar beneficios para la economía popular y nacional.
Veamos el triste caso de Zapatero y Calderón.
El caso del presidente español del PSOE, es más que evidente.
El de Calderón no lo es tanto, por la poca memoria nuestra. Pero.
El actual Presidente de México, fue un feroz anti neoliberal, cuando era presidente nacional del PAN. En un comentario, citó varias frases demoledoras contra el neoliberalismo, el Fobaproa y el TLC. El título, lo dice todo: Calderón, el anti neoliberal más neoliberal. Pero.
Volvamos a las diferencias y semejanzas, tanto del neoliberalismo y el nacionalismo.
Ambos son proyectos capitalistas, con muy alta participación del Estado y ambos son fundamentalmente neoliberales, pues no frenan, ni reducen la concentración de la riqueza y los dos apoyan los salarios inconstitucionales, colonialistas y esclavistas.
Los primeros, más. Los segundos, menos.
Entonces ¿Dónde están las diferencias?
El neoliberalismo tiene como prioridad, el Mercado Externo. El nacionalismo, el Mercado Interno, sin descuidar el Externo.
El Estado de Bienestar, también es otra diferencia. El neoliberalismo lo sataniza. El nacionalismo, lo promulga. Lo alza, como estandarte.
El neoliberalismo insiste, pese a las evidencias en contrario, de que el Mercado se puede auto regular sin la intervención del Estado.
El nacionalismo, confirmó en que el libertinaje del Mercado, conduce a las crisis recurrentes del capitalismo. Y considera fundamental, la regulación del Mercado por el Estado.
Respecto a la concentración de la riqueza y los salarios coloniales y/o esclavistas, tanto el neoliberalismo como el nacionalismo difieren sólo, en los grados y en los niveles. Los nacionalistas, buscan que no lo sean tanto. No que desaparezcan, con un salario Global.
En resumen: La disputa por la nación no es entre el fatalismo de que: El hombre es el lobo del hombre y el sueño de que deje de serlo.
La disputa por la Nación, es: En que lo sea y no lo sea, tanto.
No es lo mismo, pero es igual.